Me presento

Soy Polilla, estudiante de Hispánicas y amante de las buenas letras. Escribo este blog con dos fines. El primero es egoísta: pretendo almacenar datos interesantes, apuntes, etc. El segundo es altruista: ya que vuelco una cantidad ingente de datos en este caos que es la red, espero que al menos a alguien le sirva.
Así que, querido lector, todo tuyo.

jueves, 18 de agosto de 2011

Schopenhauer

Documental de la televisión argentina dirigido por el filósofo español Fernando Savater:


jueves, 21 de abril de 2011

La Ilustración


Para la Ilustración sólo se exige libertad y, por cierto, la más inofensiva de todas las que llevan tal nombre, a saber, la libertad de hacer un uso público de la propia razón, en cualquier dominio. Pero oigo exclamar por doquier: ¡no razones! El oficial dice: ¡no razones, adiéstrate! El financista dice: ¡no razones y paga! El pastor: ¡no razones, ten fe! (Un único señor dice en el mundo: ¡razonad todo lo que queráis y sobre lo que queráis, pero obedeced!) Por todos lados, pues, encontramos limitaciones de la libertad. Pero ¿cuál de ellas impide la ilustración y cuáles, por el contrario, la fomentan? He aquí mi respuesta: el uso público de la razón siempre debe ser libre, y es el único que puede producir la ilustración de los hombres. El uso privado, en cambio, ha de ser con frecuencia severamente limitado, sin que se obstaculice de un modo particular el progreso de la ilustración.

Kant, ¿Qué es la Ilustración?, en Berlinische Monatschrift.

jueves, 7 de abril de 2011

Las bicicletas son para el verano


Algunas notas importantes sobre la obra de Fernando Fernán Gómez. Por supuesto, dichas notas no valen de nada si no se ha leído el libro.
  • Es una obra de teatro, estrenada el 23 de abril de 1982 en el Teatro Español de Madrid.
  • Este autor confesó que su escritura se debe a los deseos de escribir algo que sucediese en la época de su adolescencia. Algo sencillo, cotidiano, en que las situaciones límites, si existían, no lo parecieran.
  • La obra presenta y representa la vida de un grupo de personas en el contexto de la guerra civil. El conflicto armado se instaura en el principal protagonista, con algunas de sus fatales manifestaciones y consecuencias

sábado, 2 de abril de 2011

Analítica de lo bello

LA SATISFACCIÓN EN LO AGRADABLE ESTÁ LIGADA CON EL INTERÉS:
Lo agradable es lo que gusta a los sentidos en la sensación. Ahora es la ocasión de señalar una confesión muy frecuente, que resulta del doble sentido que puede tener la palabra sensación. Toda satisfacción, dicen, es una sensación (la sensación de un placer). Por consiguiente, toda cosa que gusta, precisamente por esto, es agradable (y según los diversos grados o sus relaciones con otras sensaciones agradables, es encantadora, deliciosa, maravillosa). Pero si esto es así, las impresiones de los sentidos que determinan la inclinación, los principios de la razón que determinan la voluntad, y las formas reflexivas de la intuición que determinan el juicio, son idénticas en cuanto al efecto producido sobre el sentimiento del placer. En efecto; en todo esto no hay otra cosa que lo agradable en el sentimiento mismo de nuestro estado; y como en definitiva, nuestras facultades deben dirigir todos sus esfuerzos hacia la práctica, y unirse en este fin común, no podemos atribuirles otra estimación de las cosas, que la que consiste en la consideración del placer prometido. Nada importa la manera de obtener ellas el placer; y como la elección de los medios puede por sí solo establecer aquí una diferencia, bien podrían los hombres acusarse de locura y de imprudencia, pero nunca de bajeza y de maldad: todos, en efecto, y cada uno según su manera de ver las cosas, correrían a un mismo objeto, el placer.
Cuando se designa un sentimiento de placer o de pena, la palabra sensación tiene un sentido distinto que cuando sirve para expresar la representación que tenemos de una cosa (por medio de los sentidos considerados como, una receptibidad inherente a la facultad de conocer).
En efecto; en este último caso la representación se refiere a un objeto; en el primero, no se refiere más que al sujeto, y no sirve a ningún conocimiento, ni aun a aquel por el cual se conoce el sujeto a sí mismo.
En esta nueva definición de la palabra sensación, la entendemos como una representación objetiva de los sentidos; y para no correr nunca el riesgo de ser mal comprendidos, designaremos bajo el nombre, por lo demás muy en uso, de sentimiento, lo que debe siempre quedar puramente de subjetivo, y no constituir ninguna especie de representación del objeto. El color verde de las praderas, en tanto que percepción de un objeto del sentido de la vista, se refiere a la sensación objetiva; y lo que hay de agradable en esta percepción, a la sensación subjetiva, por la cual no se representa ningún objeto, esto es, al sentimiento en el cual el objeto es considerado como objeto de satisfacción (lo que no constituye un conocimiento).
Ahora se ve claro que el juicio por el cual yo declaro un objeto agradable, expresa un interés referente a este objeto, puesto que por la sensación, este juicio excita en mí el deseo de semejantes objetos, y que en esto, por consiguiente, la satisfacción no supone un simple juicio sobre el objeto, una relación entre su existencia y mi estado, en tanto que soy afectado por este objeto. Por esto no se dice simplemente de lo agradable que agrada, sino que nos proporciona placer. No obtiene, de nuestra parte un simple asentimiento, sino que produce en nosotros una inclinación, y para decidir de lo que es más agradable, no hay necesidad de ningún juicio sobre la naturaleza del objeto; también los que no tienden más que al goce (es la palabra por la cual se expresa lo que hay de íntimo en el placer), se dispensan voluntariamente de todo juicio.

Crítica del Juicio, Inmanuel Kant.

viernes, 1 de abril de 2011

La locura es la fuente de la sabiduría


...el rey templo,
Apolo el avieso,
capta la visión
a través del más directo
de los confidentes, la mirada
que conoce todas las cosas.
Las mentiras no las aprehende,
ni dios ni hombre le engaña
con obras ni con designios.

El nacimiento de la Filosofía, Giorgio Colli, Tusquets.

martes, 29 de marzo de 2011

Malestar social y empobrecimiento en el Barroco español

EL MALESTAR SOCIAL Y EMPOBRECIMIENTO DEL PAÍS

«El pueblo español estaba dividido en hijosdalgo y pecheros; es decir, en libertadores y libertados: los hijosdalgo estaban exentos de todo impuesto, y no se les podía quitar por causa de deudas contraídas ni la casa, ni el caballo, ni la armadura, y, por el contrario, los pecheros, la parte trabajadora y agricultora de la nación, tenían que soportar todas las cargas; en cambio, puede decirse que estaban excluidos de ocupar los destinos del Estado. Así se comprende la aversión que poco a poco se fue cobrando al comercio y a la industria; en una palabra, a todo lo que significase algún trabajo, tanto más cuanto que, desde que hubo paz en la Patria, se podía hacer fortuna con mayor rapidez y facilidad en las colonias y en las campañas del exterior, lo que trajo por consecuencia que el lujo fuese creciendo considerablemente. Se procuraba con afán poseer rentas fijas a base de Ingresos Reales, que aseguraban para la sucesión en la persona del Mayorazgo; después, los poseedores de estas rentas se veían elevados a la categoría de nobles, y despreciaban el trabajo que los había encumbrado. Desde que Felipe II erigió a San Lorenzo el grandioso monumento del Escorial, el orgullo de los Grandes y de los ricos consistió en construir conventos igualmente en sus posesiones, y el pueblo, que no tenía probabilidades de poder alcanzar la nobleza, rivalizaba en el deseo de entrar en uno de esos conventos para disfrutar de su vida sosegada, sin trabajo y libre de cuidados. Esta doble aspiración o tendencia hacia la nobleza y hacia la vida del convento; con otras palabras, el deseo de gozar de la vida, fue funesto para la nación, que se iba cada vez más alejando del trabajo.»

Mi lema


Releyendo el Quijote he decidido que este ha de ser mi lema a partir de ahora:

"Hoy es el día más hermoso de nuestra vida, querido Sancho; los obstáculos más grandes, nuestras propias indecisiones; nuestro enemigo más fuerte, el miedo al poderoso y a nosotros mismos; la cosa más fácil, equivocarnos; la más destructiva, la mentira y el egoísmo; la peor derrota, el desaliento; los defectos más peligrosos, la soberbia y el rencor; las sensaciones más gratas, la buena conciencia, el esfuerzo para ser mejores sin ser perfectos, y sobre todo, la disposición para hacer el bien y combatir la injusticia donde quiera que estén."

Miguel de Cervantes Saavedra, Don Quijote de la Mancha

A veces los locos muestran más sabiduría que los cuerdos.